¿Eres de los que tiene problemas para conciliar el sueño o se despierta a mitad de la noche y no puede volver a dormir? se calcula que el 40% de la población mundial duerme mal. No quiere decir que todos tengamos un trastorno severo del sueño, pero seguramente hay alguno de sus ingredientes.
Investigadores del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia evaluaron la asociación entre la calidad del sueño y los patrones alimentarios de casi 500 mujeres y descubrieron que cuanto peor era su calidad de sueño y menos dormían, más consumían azúcares añadidos, grasas saturadas y cafeína.
Según el estudio, los niveles de insomnio pueden influir en el hipocampo, la región de su cerebro que regula la ingesta de alimentos. Cuando consumes alimentos azucarados y grasos provoca una actividad anormal del hipocampo y eso hace que sea más difícil evitar los antojos de alimentos poco saludables.
Una razón por la que la falta de sueño de calidad podría llevar a comer en exceso es porque se cree que estimula el hambre y / o suprime las señales hormonales que comunican la plenitud.
¡Pero ojo! también hay efectos negativos al dormir si comes mal. Hay una razón por la que determinadas comidas no nos permiten conciliar o mantener el sueño en las noches, mientras otras nos hacen dormir como un bebé.
La segunda pregunta puede ser, ¿Qué tan bien comes en tu día a día? Y cuando decimos bien, no nos referimos a lo primero que te encuentras en la cocina. En nuestra sociedad moderna, a menudo trabajamos hasta tarde, comemos tarde y a veces el sueño se deja de lado. Es así como terminamos comiendo cualquier cosa o comiendo en exceso porque llegamos cansados y con hambre.
El secreto está en tres componentes claves presentes en algunos alimentos que están directamente relacionados con el sueño: el triptófano, la serotonina y la melatonina.
El triptófano es un aminoácido esencial que nuestro cuerpo no fabrica de manera natural, sólo se puede obtener en algunos alimentos. Este aminoácido permite al organismo obtener serotonina (la hormona de la felicidad), cuya función es modular el estado de ánimo, regular el apetito, la digestión y el comportamiento del sueño.
A veces no se trata solo de los excesos en la cantidad, sino que hay algunos alimentos que debes evitar antes de dormir si queremos conciliar el sueño cual bebés y levantarnos a la mañana siguiente frescos como rosas.
Lee también Tips para controlar el insomnio
Por eso, si deseas empezar a mejorar tus patrones de sueño es necesario que consideres eliminar estos alimentos:
Dirás, pero por qué el chocolate, pues resulta que el chocolate tiene cafeína, especialmente el chocolate negro. Al igual que el café de la mañana, el chocolate es también un estimulante que mejora la agilidad mental, reduce el cansancio y acelera nuestro metabolismo, precisamente por eso no es exactamente lo que necesitamos si lo que queremos hacer es dormir.
Lo primero que debemos saber es que la digestión se pone muy lenta durante el sueño, al digerir comida picante necesitas de un esfuerzo adicional por lo que será necesario más tiempo si la digestión se realiza mientras estamos intentando dormir.
Comer comida picante antes de acostarnos afectará tu sueño y hará que nos despertemos varias veces durante la noche. Además, estos alimentos aumentan la temperatura corporal.
Así que ya lo sabes, la próxima piénsalo mejor antes de comer este tipo de alimentos si lo que quieres es dormir bien.
La cafeína es, como dijimos anteriormente, un estimulante del sistema nervioso central, aumenta la producción de adrenalina, una hormona que permite que el cuerpo haga uso de la energía disponible. De hecho, necesitas al menos 6 horas para que el cuerpo elimine la mitad de la cafeína de una taza de café.
Por eso es aconsejable que no lo consumas en la noche y muy poco durante el día para que tu sueño no se vea afectado.
Cuando consumimos cerveza o unas copitas de vino parece que enseguida nos quedamos rendidos en la cama. Y pareciera que así es, pero en realidad es que el consumo de alcohol reduce la duración de la conocida fase REM, o fase de movimientos rápidos oculares, que es la fase del sueño durante la que nuestro cuerpo se recupera y se prepara para mantenerse despierto al día siguiente.
Así que ten cuidado con estas bebidas y ten en cuenta que no es el sueño que necesitas para descansar.
Muchos somos amantes de las comidas rápidas, de salir a comer cositas un poco grasosas pero no es lo único que podemos llamar grasoso. Los alimentos grasosos también es posible que los preparemos en casa, así que procura no consumir estos alimentos antes de ir a la cama. Ya que evitarás tener una ingesta pesada que no nos permitirán dormir plácidamente.
Entre esta lista de alimentos también hay algunas verduras como coliflor y brócoli que no son de fácil digestión, al igual que repollo, vegetales de hojas verdes, apio, calabazas, que es recomendable consumirlos durante el día, pero no en la noche.
Ten en cuenta estos consejos a la hora de dormir y piensa siempre que eso puede influir en que puedas dormir de una forma reparadora y placentera. Recuerda que lo ideal es cumplir con esas horas de sueño que tu cuerpo necesita, descansar lo suficiente y llevar una vida laboral y física mucho más saludable apoyada de una buena alimentación.
¡Conoce nuestros productos Simmons para hacer de tu descanso un momento ideal!